Presentación del Blog

Bienvenidos a mi Blog: ¡Cosmogónica! El que pretende ser una ventana, mi ventana abierta al Universo, al Cosmos, mi forma de ver la Astronomía, que para el caso es lo mismo. Principalmente artículos sobre Astronomía, opinión, Ciencia, enlaces de interés, libros, y sobre todos la posibilidad de participar, comentar y dejar tus impresiones, porque tú también eres parte del Cosmos. En algún tiempo tus átomos formaron parte del corazón de una estrella, o del Principio del Cosmos.

sábado, 5 de mayo de 2007

Cine vs Astronomía

Este no va a ser un artículo muy científico, ni tampoco una crítica de cine, sólo van a ser mis impresiones sobre la relación entre cine y Astronomía y desgraciadamente la segunda sale perdiendo. Quiero hacer constar que me encanta el cine fantástico (ciencia-ficción, etc. porque para ver desgracias me basta con el telediario) y que de las series que emiten mi favorita es Star Trek.Cuando me siento a ver una película o voy al cine no espero ver una obra maestra, solo espero entretenerme un par de horas, y si de paso la película es buena mucho mejor, pero me es imposible no ver según que “desastres” en algunas películas de ciencia-ficción. En algunas ocasiones son desastres necesarios para el argumento de la película, pero siempre quedan.

El más común de los desastres: los viajes por el espacio. Ir a cualquier sistema planetario es tan sencillo como coger el autobús, no se tarda nada de tiempo en llegar y se puede viajar con cualquier tipo de nave y normalmente con motores químicos, no me imagino que cantidad de combustible haría falta ni el tamaño de los depósitos, en la gasolinera espacial “me pone Ud. 3 hectómetros cúbicos de hidrógeno con oxigeno al 50%”. Es evidente que de otro modo las películas se desvirtuarían un poco, “muchachos, vamos a rescatar a unos colonos de unos alienígenas que están en un planeta en el quinto pino” y para cuando llegan los rescatadores son unos octogenarios y no queda ni rastro de los colonos ni de la colonia, al menos de la humana. Pues no, no pega. Pega tan poco como las maniobras aerodinámicas de las naves en el espacio, AERO de aire, DINÁMICAS de movimiento, vamos que es imposible, los flaps y el timón no funcionan demasiado bien sin aire.Otro detalle es que en todas las naves hay una estupenda gravedad artificial y nunca se explica de donde sale, es como si viniera de serie como el aire acondicionado o los elevalunas eléctricos. Tampoco explican nunca como contrarrestan la inercia “preparados para entrar en la velocidad-luz” y zas! entran sin más, sin aplastarse contra el asiento y quedar hechos un amasijo sanguinolento.Tampoco sufren los efectos relativitas, dilatación del tiempo, contracción de longitudes, aumento de la masa... si viajaran 50 años a la velocidad de la luz (lo que es imposible, aunque podrían viajar al 99%) cuando llegaran a destino serian tan jóvenes como cuando iniciaron el viaje ya que para nuestros intrépidos viajeros sería instantáneo, sin embargo, para los que nos quedásemos en tierra si habrían pasado 50 años, así que cuando regresaran casi todo el mundo a quien conociesen habrían muerto o serian muy pero que muy mayores.Las comunicaciones, lo que ocurre con las comunicaciones no ocurre ni en los mejores sueños de los técnicos de telefonía móvil ¡en toda la galaxia hay cobertura y ésta es instantánea! ni siquiera hay que esperar el establecimiento de llamada, claro que si las tarifas son equivalentes a la calidad del servicio... “llamada de 3 minutos a Próxima Centauri. Desglose: el “no” establecimiento de llamada 4.000.000€ Duración de la llamada: 3 minutos a 500.000€ / segundo = 90.000.000€ impuestos directos no incluidos. Gracias por usar nuestros servicios. Nota como Próxima Centauri esta a unos 4 años-luz le vamos a cobrar la parte proporcional de la primera parte y la parte proporcional de la segunda parte, vamos que tendrá que aflojar otros 5.000.000€” y encima seguro que se corta y tienes que llamar otra vez.También queda de manifiesto que viajar por el espacio es un placer, ninguna nave lleva blindaje contra los rayos cósmicos, ni contra el polvo interestelar, no digamos ya asteroides y demás, (que puede agujerear la nave de parte a parte) ni contra el viento solar, total ¿para qué? Si solamente son mortales de necesidad. Y además es que ni se molestan en detectarlos.

Y estas no son mas que cuatro cosas que se me han ocurrido, hay muchas mas, y seguro que al lector le vienen a la memoria algunas cosas que le han llamado la atención. Después hay algunas “pifias” fabulosas, como por ejemplo esa en la que los protagonistas viajan a la velocidad de la luz durante 4 horas para ir más allá de la órbita de Plutón (el Sistema Solar tiene algo más de 5 horas-luz de radio) y lo bueno es que llegan; o esa otra en la que el chico abraza a la chica por encima del hombro y miran, flanqueados por su androide de protocolo y su astro-droide, desde la fragata médica en la que a él le han injertado una mano robot, y ven como se aleja una nave y se interna en la galaxia que se ve allá a lo lejos (genial); o esa nave que espera ver como de la colisión de dos planetas gaseosos gigantes se va formar una estrella en sus narices, y se va a encender como si fuera un enorme fósforo (una estrellita como nuestro Sol tardaría entre 10 y 150 millones de años en formarse y “encenderse”) Las películas de catástrofes cometarias también están muy bien, de echo el presente artículo se debe a una en concreto que me pareció de lo más lamentable. Un enorme cometa amenaza con destruir La Tierra, disparan una bomba contra el cometa y le arrancan un pedazo de unos 10Km de diámetro (solamente) y la gente se queda mirando como entra en la atmósfera y tarda una barbaridad de tiempo en atravesarla (un cometa a unos 70Km/s tardaría unos 2 segundos en atravesarla) y la gente que estuviera contemplando el espectáculo quedaría carbonizada al instante y la vida se extinguiría (bastaría uno de 1Km) y el meterse en un refugio no ayudaría en nada, a menos claro está que pudiesen estar entre 8 y 100.000 años en el boquete. El impacto que acabó con los dinosaurios fue más o menos como ese. Las explosiones con fuego y llama en el espacio, en total ausencia de aire. La transmisión de vibraciones desde una nave espacial a la superficie de La Luna. ¿Seguimos?En la citada serie del principio y tal vez en SG1 (que no se meten en según que berenjenales) intentan explicar con alguna base científica el por que de todas las cosas. Alcanzar la velocidad de la luz y superarla miles de veces lo ha resuelto con el proverbial “motor de curvatura” que les permite entrar en el “hiperespacio” una solución fabulosa. Tienen unos estupendos sistemas de soporte vital en la que incluyen la gravedad artificial. Y también tienen “amortiguadores de inercia” así pueden entrar a la velocidad de la luz, y más, sin despeinarse. Y luego basta que una cafetera para mandar sus magníficos escudos del muchos mega-julios al garete o tienen unos sensores “isolineales” que permiten decodificar el ADN de una mosca en el otro extremo de la galaxia y no pueden fabricar un mando a distancia que funcione a más de 4 metros. Encantador, ¿no? Y es que si las películas o las series fuesen más reales o realistas serian un tostón inaguantable y no conseguiría ni distraer, ni taquilla, ni nada. Y es que la realidad lo alcanza todo. En fin ya veremos.

martes, 1 de mayo de 2007

El Límite de Roche

En 1850 el matemático francés Edouard Roche publica una teoría que establece cual es la distancia mínima a la que se puede situar una luna de un planeta o un planeta de una estrella, y explica el porque. Cualquier luna o planeta que se encuentre a una distancia inferior a éste límite resultará destruido por la fuerza de gravedad de su astro anfitrión.
En nuestro querido y próximo Sistema Solar tenemos un ejemplo magnífico en los anillos de Saturno y otro más cercano en las mareas producidas por La Luna, aunque en el Mediterráneo no se produzcan en los océanos Atlántico y Pacífico son algo corriente. En su proximidad La Luna atrae a La Tierra y la parte más maleable del planeta, sus océanos, son “deformados” periódicamente por la fuerza de su gravedad, y a la inversa (algo que explicaré en un próximo artículo sobre nuestro satélite) La fuerza que provoca las mareas son llamadas en consecuencia “Fuerzas de Marea”. Bien, pensemos ahora en un sistema planeta-luna o estrella-planeta y en la interacción que tienen entre ambos por medio de las fuerzas de marea, el planeta atrae a su satélite y tiende a deformarlo, con lo que puede ocurrir que si la fuerza de marea con la que lo atrae es mayor que la fuerza de cohesión, la llamada auto gravitación, con la que el satélite permanece unido el satélite se romperá sin remedio. Y vamos a verlo con un sencillo cálculo, en aras de la sencillez consideremos que el satélite está formado solamente por dos partes (para simplificar el ejemplo) dividido por el eje norte-sur, así tendremos por un lado que la fuerza de cohesión o auto gravedad es:


.........M/2 * M/2 ..........52 * GM2
G = ----------------- = ----------
............(4/5R)2 ...........43 * R2


(M es la masa del satélite y R es el radio) Hemos de tener en cuenta que el centro de masas de las dos mitades del satélite se encuentran a 2/5R del centro del satélite y que entre uno y otro centro de gravedad hay 4/5R. La fuerza de marea a la que esta sujeto el satélite por parte del planeta tendrá la expresión:

.............Mp * M/2
G = -------------------- para la mitad más próxima y
..............(r-2/5R)2
..............Mp * M/2
G = ----------------------- para la mitad más alejada
.............(r +2/5R)2

(Mp es la masa del planeta y r la distancia planeta-satélite) La fuerza de rotura o de disgregación será la diferencia entre éstas:
......................................(4/5) * R * r
G * Mp * M -------------------------------------------
...............................(r-2/5R)2 * (r + 2/5R)2

Ahora supongamos que r >> R (que la distancia planeta-satélite es mucho mayor que el radio del satélite R) con lo que la expresión anterior queda como:
G * Mp * M * (4/5) * R / r3
Si hacemos r = l (l es el límite de Roche) las fuerzas de marea y de disgregación serán iguales y por tanto el satélite se romperá:
G * Mp * M * (4/5) * R / r3 = (52/43) * G * M2/R2
Despejando l:
l = 3√(44/5) * 3√( Mp/M * R)
pero teniendo en cuenta que la masa y el radio están relacionadas por la densidad d podemos escribir
l = 3√(44/5) * 3√( dp/d * R)* Rp siendo Rp el radio del planeta
De este modo podemos ver que el Límite de Roche depende de la densidad de los cuerpos a considerar y de su tamaño, es decir, cuanto más masivos sean el límite estará mas lejos y cualquier cuerpo dentro del límite sería destruido, aunque quiero insistir en lo simple del cálculo, el valor de l más común es l = 2,45 Rp para casi cualquier sistema (Tierra-Luna, etc.) con lo que podemos concluir que para casi cualquier sistema el límite estará aproximadamente a 2,5 el radio del planeta y que todo lo que esté por dentro será destruido o no podrá formar una luna.

domingo, 1 de abril de 2007

EDITORIAL DE ABRIL

Comienzo de nuevo a escribir editoriales en Cosmogónica, solo que esta vez no es para la web, sino para el Blog que es casi lo mismo y más cómodo.
De cuando escribía editoriales en la web la cosa no ha mejorado mucho, como se desprende de las editoriales de la revista "AstronomíA", los chinos e iraníes se han armado con capacidad de destruir satélites en órbita o con misiles balísticos con capacidad nuclear. La editorial analiza con tristeza como se utiliza, una tecnología que debería ser útil a sus respectivos pueblos y por ende a la Humanidad, con fines armamentísticos.
Sin contar que desde entonces se han arrasado un país con una mentira por bandera, que miles de civiles han muerto, civiles que no pidieron ser rescatados y todo ello apoyado con la tecnología espacial, tanto para mentir, como para atacar.
Triste indiscutiblemente, triste. Pero en fin, el mundo ha pasado por momentos peores durante la Guerra Fría y aquí seguimos, así que mientras estemos aquí hay esperanza.
En el mismo número del mes pasado de la citada revista aparecía un artículo de Atanasio Lleó sobre el destino del Universo... que insignificancia, que gran artículo.
Bueno, seamos optimistas, pensemos que la tecnología ayuda más que lo que puede llegar a destruir, que podemos utilizarla para más buenos fines que para malos y que mientras tengamos un voto del que disponer podremos hacer temblar a algún poderoso.

Charles Messier. Una breve biografía.


Charles Messier nació en Bandonviller, Meurthe-et-Moselle, Lorraine, Francia en 1730. Hijo de Nicolás Messier y de Francoise Grandblaise. Charles era el décimo de doce hermanos. La suya era una familia bien, venida a menos. Su padre fallece cuando él tiene solamente 11 años (1741) motivo por el cual el pequeño Charles no pudo optar a una educación superior, para la que estaba sobradamente preparado, como se demostró a lo largo de su vida.En 1751 se traslada a vivir a Paris, donde conoce al gran astrónomo de la Marina de Francia, Joseph Nicolas Deslile. Messier entra a trabajar para Deslile tras demostrar su consumada habilidad para el dibujo copiando un mapa de la Gran Muralla China. Messier comienza su labor en el Colegio de Francia como dibujante. El propio Deslile introduce a Messier en mundo de la observación astronómica, haciendo especial hincapié en la exactitud de las mediciones de todas sus observaciones. En 1755 Messier entra a trabajar en el Hotel de Cluny, sede del Observatorio de la Marina de Francia en calidad de ayudante de Deslile. Para comprender la auténtica magnitud del trabajo de Messier hay que entender en que época desarrolló su trabajo y con que fin.

Messier llega a la Astronomía casi por casualidad, con 21 años entra a trabajar para el gran Deslile, casi sin formación superior, y aun así descubrió 21 cometas y redescubrió otros 50, en una época, la Ilustración, donde lo único importante era la Astronomía de posición, donde primaba el poder calcular las efemérides de el Sol, La Luna, los planetas y posición de las estrellas que tendrían que guiar a los barcos mercantes y de guerra a través de los mares del mundo. Esta era una tarea vital para las potencias coloniales de la época (Francia, Inglaterra y España) que necesitaban guiar a sus barcos sin percances ni sorpresas, y por ese entonces aún se servían de las estrellas para navegar. No fue hasta 1762 cuando un carpintero inglés, John Harrison, tras treinta años de trabajo, revolucionó la navegación gracias a un invento prodigioso: el reloj de precisión.La historia del Catálogo de Messier comienza casi un siglo antes, cuando el gran astrónomo inglés Edmond Halley predijo la vuelta del cometa que lleva su nombre. Para 1758 esperaban en toda Europa su regreso con agitación porque su vuelta confirmaría la Ley de la Gravitación Universal de Newton. Por ese entonces Messier ya observaba más que Deslile y buscaba el cometa Halley con ahínco. En agosto de ese mismo año sucedió un hecho que llamaría la atención de Messier y que más tarde se revelaría fundamental. A mediados de agosto Messier descubrió un cometa, que aunque nada tenía que ver con el Halley, al seguir su trayectoria, descubrió una nebulosa entre Tauro y Géminis la cual le sorprendió, guardó este descubrimiento y continuó buscando “su” cometa.El tiempo pasa y el cometa no aparece Messier comienza a sospechar que los cálculos de Deslile son erróneos y comienza a barrer el cielo sistemáticamente en busca del Halley. Finalmente en enero de 1759 Messier haya el Halley, aunque un granjero alemán aficionado a la Astronomía lo redescubrió en las navidades de 1758, cosa que Messier no supo hasta marzo de ese año. Deslile mayor y enfermo, le obligó a ocultar el hallazgo y lo que podía haber sido un co-descubrimiento que les hubiera llenado de gloría quedó en el fondo de un cajón, quizá por la soberbia de Deslile. En los meses siguientes Messier descubrió dos cometas más.

En la misma época en la Deslile se retira comienza en Europa la “caza” a gran escala de cometas, mientras Messier es nombrado como el principal astrónomo del Hotel de Cluny. En 1760 mientras observa en la región de Acuario, siguiendo el camino que había recorrido el Halley descubrió otro “cometa” y tras estudiarlo durante varias noches observó que no se movía, había dado con otra nebulosa. En 1764 Messier descubre un cometa que llegó a alcanzar una magnitud de 3 y le reportó fama y orgullo, y el 3 de mayo de 1764 descubre otro objeto que le recordó a aquel primero que años antes había aparecido ante su ocular mientras buscaba el Halley y es entonces cuando un poco harto de estas “molestas nebulosas” se decide por hacer un catálogo que reuniera todos esos objetos nebulosos que podía ser confundidos con cometas, para evitar que él mismo y otros colegas perdiesen el tiempo con ese tipo de objetos. Con esto nace una nueva rama de la ciencia casi desconocida hasta entonces: la Astrofísica.

Messier comienza el estudio sistemático de objetos fijos, algo muy diferente la tradición astronómica de la época, realiza descripciones tan detalladas como le permite su precario equipo, estudia su morfología y su naturaleza gaseosa, estelar, etc. En 1764 comienza la elaboración del catálogo que lleva su nombre incluyendo objetos que puedan ser confundidos con cometas al ser observados con pequeños telescopios, después incluye objetos que puedan ser confundidos con cometas al observarlos a simple vista, y finalmente incluye objetos como Las Pléyades o El Pesebre los cuales es muy difícil que nadie lo pueda confundir con un cometa, pero por ese entonces Messier le había tomado tanto cariño a su catálogo que su interés por terminarlo con un número “redondo” le forzó a incluir este tipo de objetos cada vez que se descubría uno nuevo. Entre 1764 y 1779 Messier continuó la búsqueda de cometas llegando a descubrir 12 de ellos.

Desde 1763 Messier intenta ingresar en la Academia Real de Ciencias de París, pero no lo consigue hasta 1770, cuando su trabajo es reconocido en toda Europa y es nombrado miembro de honor de numerosas academias.
Ya en 1780 Pierre François André Méchain entra a trabajar para Messier como colaborador. Siempre hubo buena sintonía entre ambos, de hecho nunca le restó meritos a su ayudante. A partir de M71 hay más objetos descubiertos por Méchain que por Messier. En 1781 Messier sufre un aparatoso accidente a causa de su natural despiste por el que queda convaleciente durante meses. En 1789 estalla la Revolución Francesa, Messier es expulsado del Hotel de Cluny y 1793 se ve obligado a huir de París ya que él es el “Astrónomo Real”. Años más tarde Napoleón le nombra Caballero de la Legión de Honor, restituyendo el prestigio perdido, aunque sin sueldo. Messier muere en 1817 habiendo publicado su catálogo entre 1774 y 1779, 10 y 15 años después de haber iniciado su recopilación.

sábado, 24 de marzo de 2007

Buena suerte Sr. Grosky

Esta frase fue pronunciada por Neil Armstrong, el primer hombre en pisar La Luna, al volver al módulo lunar, aunque es más conocida la otra, la que dice: “ES UN PEQUEÑO PASO PARA EL HOMBRE, UN PASO ENORME PARA LA HUMANIDAD” y esta otra es menos conocida.Cuando preguntaron al astronauta, éste siempre se negó a contestar, simplemente sonreía. En un principio se pensó que podía ser un cosmonauta ruso rival, pero no, ni americano tampoco y el enigma no se resolvía y mientras Armstrong sonreía. El “Buena suerte Sr. Grosky” no terminaba de aclararse y el amigo Neil no soltaba prenda y así fue durante muchos años.Un buen día, en 1995, después de una charla que ofreció el astronauta la pregunta de la ya famosa frase volvió a repetirse y fue entonces cuando por fin dio la respuesta, ya que el Sr. Grosky había muerto (esperó 26 años para poder responder)Un día cuando Neil era niño, jugaba a la pelota en el patio trasero de su casa cuando la pelota cayó cerca de la ventana de sus vecinos, los Grosky, de origen ruso, y oyó parte de una discusión en la que el Sr. Grosky pedía a la Sra. Grosky, su esposa, sexo oral a lo que esta se negaba categóricamente. Al parecer el Sr. Grosky insistía tanto que la Sra. Grosky terminó accediendo pero con una condición: cuando Neil, el chico de los Armstrong, pasease por La Luna, entonces, él tendría sexo oral.